Actualizado el 4/22/2025
Cristina Vilches regresa a la institución seis meses después de su retiro, generando cuestionamientos sobre la decisión del director Eduardo Cerna
Cristina Vilches, exjefa de Inteligencia de la Policía de Investigaciones (PDI), fue reincorporada a la institución en calidad de asesora externa tras haber sido llamada a retiro en octubre de 2024 debido a su participación en el denominado caso Monsalve. La decisión, tomada por el director nacional Eduardo Cerna, ha sorprendido tanto al interior de la PDI como en el ámbito político y judicial.
Vilches fue retirada de su cargo luego de que se conociera que, siguiendo una solicitud del entonces subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, ordenó a personal a su cargo la revisión de cámaras de seguridad para esclarecer los movimientos de Monsalve y su subalterna la noche del 22 de septiembre, previa a la denuncia por violación contra el exsubsecretario. Estas diligencias, realizadas antes de que se ingresara formalmente la denuncia, situaron a Vilches en el epicentro de las críticas y eventualmente llevaron a su desvinculación de la institución.
No obstante, casi seis meses después, Cerna decidió reincorporar a Vilches como asesora externa bajo la modalidad de contrato a honorarios hasta diciembre de 2025, con funciones centradas en asesorar proyectos de mejoras en el área de inteligencia y prestar apoyo a la escuela de inteligencia de la PDI. Desde la institución explican que su experiencia resulta fundamental para proyectos en desarrollo que quedaron inconclusos tras su salida.
La medida ha levantado críticas desde algunos sectores que cuestionan si esta nueva vinculación a la PDI representa un pago de favores políticos o debilita las señales de transparencia y responsabilidad que se quisieron dar tras el escándalo. También se ha mencionado que Vilches, al estar ya retirada, recibiría tanto su pensión como honorarios, lo que genera sospechas de una “doble remuneración” estatal. Pese a ello, fuentes policiales han defendido la decisión aludiendo a la experticia de Vilches y el carácter acotado de su asesoría.
El episodio se suma a las tensiones y dudas sobre la lentitud en el avance investigativo del caso Monsalve, en el cual persisten críticas hacia la conducción institucional y la relación entre la PDI y el Ministerio del Interior.